10º Aniversario Rhythm & Flow. Barcelona
Tal cómo está el patio de mi casa, aguantar en el negocio musical diez años, más que una proeza parece un milagro. Y si encima estamos hablando de Reggae, nos situaremos en paraísos ultra terrenales.
Rhythm & Flow, primero como promotora de conciertos y ahora como agencia de Booking y Management ha aguantado las embestidas de las variadas crisis y sigue ahí, al pie del cañón mirando al futuro con la esperanza de que los nubarrones decrezcan.
Al bueno de Roc, cabeza visible del invento, se le veía preocupado días antes de la celebración de la fiesta del décimo aniversario. Su preocupación era la misma de la mayoría de promotores: llenar la sala.
Cuesta Dios y ayuda movilizar a los aficionados y por mucho que se pongan velas a Santa Rita o se recen un montón de Padrenuestros, siempre queda la duda de si el evento funcionará.
Los bolsillos están más que vacíos y a la mínima que un elemento externo como la lluvia, un puente (no precisamente el de Waterloo) o el impertinente fútbol asoman su cabecita, todo puede irse al traste.
En el caso que nos ocupa, el agua del cielo y el funesto día de la Hispanidad, se dieron la mano para molestar todo lo que pudieron y aunque el ambiente fue bueno, debería haber sido aún mejor.
Hip Hop y Reggae se aunaron para darle brillo a una fiesta en la que sobre todo prevaleció el amor por una causa común y el agradecimiento por el trabajo hecho durante una década.
Casi seis horas de concierto en las que artistas y amigos relacionados con la agencia, dieron su do de pecho particular para darle brillo al feliz evento.
Ritmos Hip Hop y jamaicanos alternándose para ejemplarizar el momento de fusión que viven dichos estilos. Géneros más primos que hermanos acostumbrados a congeniar, aunque lanzar loas a Rastafari en medio de un “rapeo”, sigue pareciendo algo incongruente.
Destacaron los Pinnacle Rockers (liderados por Little Pepe y Shabu), Aniki, cada día con un estilo más definido pero a la que le jugaron una mala pasada unas bases poco acertadas y un resfriadillo inoportuno, los resucitados La Puta Opepé y por encima de todos, Joey Fever, un cantante sueco de muy buen estilo al que habrá que tener en cuenta si supera sus problemas de fuelle.
Caras de alegría antes, durante y después de una función que sirvió para soplar las velas de un pastel imaginario, el que valía para festejar los diez años del nacimiento de Rhythm & Flow. Felicidades y gracias por el esfuerzo.
Texto: Barracuda
Fotos: Laia Buira
[…] 10º Aniversario Rhythm & Flow. Barcelona – Reggae.es […]