El Dancehall estuvo en Barcelona. Crónica Elephant Man
Eran las 21:30 cuando a Black Huron le toca una tarea difícil, comenzar su show con una Salamandra prácticamente vacía. Muchas ganas sobre el escenario demostrando lo mejor que sabe hacer: ¡dancehall! Y es que era una noche para el género. Con poco más de medio centenar de personas llega el momento de Fly Katanah. Poco a poco y con estilo reunió a unas primeras filas , llegando a tocar su fibra sensible con el emotivo «Que me vas a contar».
Prince Osito acompañado de una corista, un MC de apoyo, dos bailarinas y un selector, toman el escenario.»Wake up África» , «Diobu Boy», «Nadie como tú» o la versión drum & bass «We Leaving» en colaboración con Gentelman y Benny Page resuenan ya en los oídos de un público mucho más diverso a lo que estamos acostumbrados; proveniente de Madrid, Zaragoza, Málaga, Valencia y diferentes puntos de la geografía. Es entonces cuando desde el fondo de la sala se puede apreciar un mar de teléfonos móviles en modo rec, el motivo: Attitude Dancehall Crew.
Prima Cali y La Resca junto a sus Attitude Blood Drame Drame, Annete y Afrokillah pisan la tarima y dejan claro lo que son: dancers sin aditivos.
Terminado el show, Weed-ow de King Horror se pone a los controles, suena «Who Dem» de Capleton, la audiencia explota, tienen claro a lo que han venido.
Antes de que el reloj marque la media noche, 20th Century Fox intro suena entre una lluvia de disparos, cristales rotos y demás samplers, Energy God se dirige a los presentes desde detrás del escenario y comienza el show, Buzz
riddim es el primero de los 78 riddims que mi grabadora registró; «Haters wanna war»: Elephant Man está en Barcelona.
«Higher Level», «Rah Rah”, «Bun bad mind» el elefante trepa por los altavoces, interactúa con el público, lanza agua por todos lados haciendo que los técnicos tengan que tapar la mesa de monitores, espectáculo garantizado.
El show se para, Elephant Man recibe una llamada telefónica, es Buju Banton, Energy God deja claro su mensaje, manos al aire si quieres a Buju libre.
«Pon di river», «Nuh Linga», «Gully Creepa», «Sweep» en poco más de cuatro minutos y es que Energy God tiene ganas de más, «Shake that body», «Limbo», «Sidoung», «Miley Cyrus», «Crocodile», o el veraniego
«Dash watta» acompañado de su hija pequeña en el escenario.
A medida que se acercaba a producciones más recientes cercanas a la soca, o vertientes musicales indescriptibles para mi persona como «Harlem Shake», los presentes perdían algo de interés, que volverían a retomar cuando
apostó por riddims más clásicos: «Driver» de Buju Banton sobre Taxi riddim, Golden Hen riddim, Punany Riddim o «One chapter a day» sobre el Real Rock return riddim son algunos de ellos.
El desgaste físico se hizo presente en registros como «Let me be the man» aunque todavía le quedaban fuerzas para un largo repertorio incluyendo «Bad man style” o «The Bombing».
Un show enérgico de poco más de 75 minutos, propio de su sobrenombre, que seguro no dejó indiferente a nadie.
Cierran la noche Fire Warriors y King Horror con un servidor mirando el reloj para no perder el último metro y escuchando entre risas «espero leer el tracklist completo». Trabajo imposible después de lo vivido.
Texto: Fnestaselcta
Fotos: Laia Buira LaiaBuiraFoto, Flikr,