Reggae is a Mission, not a competition, Martes 19
Parte meteorológico: más claros que nubes y mucho calor, Benicasim se normaliza. Beban agua que luego las deshidrataciones son muy malas de pasar.
Grabar discos de Dub hoy en día más que una proeza es un milagro y si además se utilizan canciones de Pink Floyd para remozarlas con sonidos jamaicanos, la osadía es incluso peligrosa. Easy Star All-Stars, salieron del envite con decoro, reconstruyendo el The Dark Side of the Moon de manera sorprendente y estimulante, no se puede decir lo mismo de su traslación al directo. Si el Reggae es de por sí una música de estudio, el Dub lo es muchísimo más. La dificultad de trasladar los efectos de la mesa mezcladora a instrumentos no electrónicos es enorme, y los americanos fallaron claramente en su intentona. Guitarrazos estridentes, arreglos de teclado nada coherentes y unas prestaciones vocales poco estimulantes, hicieron naufragar la nave y no hubo supervivientes. La versión del Thriller de Michael Jackson fue de sonrojo. Una lástima. En el estudio se está más cómodo, ése debe ser su hábitat natural.
Los ganadores del Reggae Contest Europe, Wailing Trees, muestran buenas maneras pero aún les falta definir su estilo. A ratos el vocalista toma como modelo a Steel Pulse emulando a David Hinds y en otras utilizan los trucos de Dub Inc.para elevar el tono bailable de su propuesta, demasiadas incongruencias de estilo para emitir un juicio razonable. El trabajo dignifica, dicen, pero en el caso de los franceses, además de dignificarlos, va a resultar imprescindible para que su futuro sea exitoso. Esperaremos, no hay prisa.
Diez veces aparecerá Alpha Blondy en el escenario principal del Rototom y diez veces triunfará. Su concierto no varía nunca especialmente, pero su carisma es tan grande que la adoración de sus fans, es perpetúa. Siempre le acompaña la competente The Solar System, todo un seguro de vida que garantiza calidad y categoría musical. El africano sigue en buena forma física y vocal desgranando su conocido repertorio con fluidez, ganas y la maestría ganada en sus años de experiencia. We don’t like war, proclama emocionado y el público enarbolando banderas de todos los países saluda su arenga emocionado. Cocody Rock, Massada y sobre todo su habitual inicio con la gloriosa Jerusalem, nunca fallan, composiciones maestras y perennes. Una apuesta segura que únicamente tiene un problema: el desgaste que produce al espectador que ha asistido al mismo espectáculo varias veces, entre ellos me cuento y el disfrute es mucho menor.
La variedad siempre gana y espolea, esta edición 2014 la contempla con el mal llamado Reggae Revival y su principal figura dio ayer muestras claras de su categoría, huyendo del siempre inútil etiquetaje. ACR está preparando un interesante documental sobre este tan inspirador como arbitrario tema con el que espera esclarecer todas las dudas posibles, sus pros, sus contras y su futuro. No deberían perdérselo.
Es tanta la ilusión y las expectativas que despierta Chronixx que finalizado su show las discusiones fueron acaloradas y por supuesto llenas de interés. El resultado de las positivas disputas fueron parejas, yo me inclino por su triunfo absoluto.
Para no variar, me lanzaré a una piscina sin agua: Dejando en otro nivel vocal al inalcanzable Romain Virgo, el show, contemplado globalmente, del nuevo fenómeno jamaicano, fue el mejor de lo que llevamos de Rototom. Diferente, atractivo, de un nivel instrumental notabilísimo, con unos cambios de registro que te llevaban del éxtasis rítmico a una atmósfera “flow” de gran densidad. Chronixx no es ni será nunca Al Green, de dios verde sólo habrá uno en la historia, pero su intento a veces fallido de utilizar el falsete es de aplaudir. Tampoco tiene un vozarrón, pero lo utiliza con sapiencia, modula los tonos y llega al final del concierto con una sobriedad que lo distingue de sus compañeros de generación. Unos compañeros que lo arroparon para contribuir a su éxito. Kabaka Pyramid, Jah9, Jesse Royal o , lejos de destruir la uniformidad del show, lo estimularon de manera subyugante.
They Don’t Know, Smile Jamaica, Here Comes Trouble, Ijah Walk, son ya clásicos contemporáneos, coreados por una audiencia que lo tiene por su nuevo héroe. Quizás estamos exagerando todo un poco pero visto el panorama, el clavo ardiendo actual se hace llamar Chronixx .
¿Veremos algún día a Soweto lanzar sus sonidos de auténtico Ska en el Main Stage?, por calidad se lo merecen, ayer la volvieron a demostrar en el Ska Club, esperemos que una de las ondas jamaicanas más estimulantes aterrice algún día en el escenario principal, lo hace con cuenta gotas y el alma oldie lo necesita.
Esta noche Junior Kelly hará un buen recital, Luciano emocionará y ¿Sean Paul? Veremos.
Esta es mi apuesta. Mañana se lo cuento si el calor no me derrite los dedos.
Texto: Barracuda
Fotos: David Sandoval Cantos, Sgamelotti, Violeta Palazón