Aprovechando la reciente publicación del libro Ska en España: La vida no se detiene (ed. Milenio), de Jaime Bajo González y un servidor, iniciamos una pequeña serie de artículos mensuales sobre temas relacionados con el libro, en los que os daremos a saborear muestras de lo que se cuece entre sus páginas y, por qué no, también plantearemos cuestiones y debates que en el libro no se han podido tratar en toda la profundidad que se merecen.

Y qué mejor forma de empezar que lanzando una mirada general a la bibliografía específica sobre ska que actualmente podemos encontrar en el mercado internacional.

No busquéis libros dedicados por entero al ska jamaicano de los años sesenta porque no los encontraréis: aunque los estudios sobre música popular jamaicana son abundantes, la historia del ska se considera hoy día un capítulo temprano de la historia más amplia del reggae, y como tal ocupa tan solo una porción de los escritos de Chris Potash, Lloyd Bradley, Chris Salewicz, David Katz y otros autores con los que todo buen conocedor del reggae debería estar ya de sobra familiarizado.

Los primeros libros dedicados por entero al ska nos transportan ya al revival de la 2Tone.Comenzamos por The 2-Tone Book for Rude Boys de Barry Miles, publicado en 1981 (en pleno movimiento del género) y 100% diseñado para el fan, con abundantes fotos e información sobre las bandas más representativas del sello británico. En 1990 se publicó la primera narración retrospectiva del revival twotonero: The Two Tone story de George Marshall, buen punto de partida para una serie de publicaciones sucesivas que irían desgranando con detalle la historia de la segunda ola del ska: Sent from Coventryde Richard Eddington (2004), Wheels out of gearde Dave Thompson (2004) o You’re wondering nowde Paul Williams (2009) permiten revivir las peripecias de The Specials y compañía, relatadas a veces en primera persona como en las crónicas escritas por los componentes de la banda de Coventry Horace Panter (Ska’d For Life,2008) y Neville Staplejunto a Tony Mcmahon (Original Rude Boy,2010).

De la larga lista de libros que deberían existir sobre los más de 30 años que suceden a la 2Tone y en que el ska se propagó por todo el mundo y dio lugar a numerosas variantes y estilos, nos apena recordar, una vez más, que por el momento no existen más que un puñado de iniciativas bibliográficas que se cuentan con los dedos de una mano. Dos de ellas pertenecen al ámbito hispanohablante: La primera es el recorrido que hicieron Aida Analco y Horacio Zetina por la historia del ska en México Del negro al blanco (2000), una valiosa iniciativa del Instituto Mexicano de la Juventud como respuesta inmediata al boom estadounidense del ska y su crucial repercusión en la cultura juvenil del país vecino.Tiempo después, en 2008, del extremo sur del continente americano nos llegó La manera correcta de gritar, original propuesta de reconstrucción de la escena argentina a partir del testimonio popular volcado en el blog de Daniel Flores (teclista de Satélite Kingston) Satélite-in-Blog.

Y ya hace tan solo unos años aparecieron en el mercado dos publicaciones de la periodista estadounidense HeatherAugustyn: Ska: An Oral History (2010) y Ska: The Rhythm of Liberation (2013), probablemente los primeros libros dedicados por entero al ska donde se intenta trazar la historia completa del género desde su aparición en Jamaica hasta fecha reciente. Con todo, no deja de ser una lástima que la autora no haya prestado atención a escenas distintas a las de los países de habla inglesa (Jamaica, Inglaterra y Estados Unidos), y que cuando ha intentado hacerlo (en las últimas páginas del segundo de estos libros) su investigación se haya limitado a repasar el tópico –muestra de ello se encuentra en el hecho de que la única banda española que llega a mencionar es… ¡Ska-p! Tendremos que enviarle nuestro libro para demostrarle hasta dónde llega la tremenda riqueza de nuestra escena.

La lista de libros dedicados al ska es aún pequeña, aunque parece que va avanzando a pequeños pasos, y por ello nos enorgullece haber podido aportar esteimportante +1 a un repertorio que esperamos continúe creciendo en años venideros.

Gonzalo FM