Desde el pasado 2016, la Pascua o Semana Santa se ha convertido en sinónimo de Dub, de sonidos graves, de bajas frecuencias y altas vibraciones … International Dub Gathering arranca su segunda edición en Barcelona, y la cosa pinta aún mejor que el año pasado.
Un cartel de lujo, nuevas áreas, pretenden abarcar aún más música durante el día y la tarde, así como nuevas programaciones culturales y familiares son algunas de las perlas que alimentaban nuestras ganas de llegar e instalarnos como siempre, el equipo de ACR y reggae.es  para contaros nuestras impresiones diarias en IDG. 

El perfecto enclave del Illa Maravilla vuelve a darnos la bienvenida en una estampa casi veraniega,  entre arboleda y piscinas, y ya podemos ver cómo el público comienza a amontonarse en la puerta desde bien temprano, ansiosos por degustar uno de los primeros festivales de la temporada.

Lo primero que nos llama la atención es el sistema cashless, una nueva pulsera en la que se recarga dinero para evitar pagar en todo el festival con dinero en efectivo y tener que llevar el dinero encima, aparte de ser un dispositivo de control de aforo, lo que creemos que va a dar para bastantes conversaciones a lo largo de estos días.

Entramos; activados, recargados y listos para la apertura del festival. Apertura que corría a cargo de representaciones estatales con el sonido de Watts Attack en el Monkey Dub, Raggatack y George Palmer en la zona Rub-a-dub y las grandísimas Purple Rockets estrenando el Back a Yard, con el sonido de Green Light, reivindicando una vez más el women power en la escena; un gustazo poder disfrutar de su show pero una pena que aún no hubiera entrado toda la gente que esperaba en la cola para unirse a nosotros.

Por esta parte, la organización decidió, con mucho acierto, regalar la entrada de día del Domingo a todos los portadores de una entrada de día del Viernes, en compensación por el tiempo perdido en las taquillas.