En 2011, cuando se publicó el debut en CD de este talentoso cantante de familia de artistas (su madre es la cantante Lorna Bennett) no se tenía la percepción por estos lares de Protoje como elemento fundamental de un aguerrido nuevo movimiento de jóvenes artistas: seguramente ahora los tiempos han cambiado y muchos de los jóvenes de esta escena se han ganado una mayor visibilidad (aunque quede todavía mucho trabajo por hacer). Este novedoso «The 8 Year Affair» es un disco importante también porque supone un manifiesto de intenciones de una generación en Jamaica, además de un consistente paso adelante de un óptimo artista.

Para resumir en pocas palabras el arte de Protoje, se trata de un estilo vocal muy ecléctico que puede recordar a veces a Damian Marley, aunque probablemente con una gama más amplia de registros, un buen talento como compositor ligado a una sensibilidad muy moderna, que amplia los límites expresivos pasando con gran desenvoltura de temas ‘roots’ a baladas acústicas o a piezas con una marcada influencia hip-hop, todo dentro de una poética muy homogénea con todos los temas en acordes menores, evidenziando un clima de gran concentración y meditación.

Es suyo el toque acústico de la canción que da título al disco, The 8 Year Affair, con un texto que es una auténtica declaración de intenciones, antes de que lleguen dos temas cruciales e intensísimos como I&I y la ya conocida Kingston be Wise, dos verdaderos himnos del retorno al ‘roots’ en Jamaica de estos últimos meses. Entre las catorce pistas de este trabajo no hay ninguna bajada de tono, aunque concedednos tener nuestras canciones favoritas, como la fantástica This is not a Marijuana Song, que juega sobre una versión moderna del clásico de Studio One Rockfort Rock o Reggae Revival, con el estribillo cantado por un Romain Virgo que está, obviamente, a la altura del encargo, el himno Music for my Heart, con un bellísimo texto sobre la necesidad de hacer música para el crecimiento espiritual y no para la reafirmación económica.

Who dem a Program y Around the World (esta última en combinación con Chris Watts) representan el lado más moderno del disco con sus guiños (largos, hasta caer quizás en lo banal) a la ‘urban black music’ estadounidense, mientras Shot by Love, que cuenta con la bella voz de la estadounidense Toi, tiene una cadencia casi rocksteady. Otra referencia directa a los clásicos es la excelente reinterpretación de Black Cinderella de Errol Dunkley, con una voz de campeonato. Grandes felicitaciones para el productor (primo, por cierto, de Protoje) Don Corleon, que ha encontrado la dimensión sonora perfecta sonora para el desarrollo de la creatividad de un artista que apasiona y estimula sin ser nunca obvio y que esperamos influya en esto a muchos jóvenes jamaicanos. ¡Para estos tiempos no es poco!

Pier Tosi

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